Tras seis años del debut del prototipo “De Tomaso P72” de acuerdo a sus creados, la versión de producción está lista para ser entregada a los rimeros clientes a finales de año.
El P72 de producción no difiere mucho del prototipo que vimos en 2019, lo que es una buena noticia. Ha sido inspirado en el De Tomaso P70 de 1965, una colaboración entre el fundador Alejandro De Tomaso y Carroll Shelby.
Se ha desarrollado sobre un bastidor monocasco formado por una pieza continua de fibra de carbono, que también se extiende a los bastidores delantero y trasero. No existen soldaduras, por lo que el fabricante afirma que su chasis establece un nuevo punto de referencia en cuando a pureza estructural.
En su habitáculo no existen las pantallas, Sistema de infoentretenimiento o algo similar, lo que sí que esta replete de materiales, con un interior sencillo y diseñado para permitir concentrarse en lo que realmente importa, la conducción. La mayoría de las superficies están cubiertas por cuero blanco cosido a mano y la fibra de carbono, mientras que una increíble variedad de mandos de aluminio (acabados en oro rosa) adornan el tablero. Todo resalta por uno de los detalles de interés, la palanca de cambios manual.
Para moverlo, trae un V8 sobrealimentado de 5 litros que, según la empresa, ha sido desarrollado exclusivamente para su superdeportivo. Se habla de 710 CV de potencia y 818 Nm de par de motor, que son dirigidos a las ruedas traseras. No han ofrecido las cifras de prestaciones, pero según los ingenieros no ha sido diseñado para dominar los récords de velocidad.
No posee interruptores para modificar los reglajes del auto, aunque la suspensión de bieletas cuenta con amortiguadores ajustables manualmente en 3 posiciones. Tampoco han querido comentar nada sobre su precio.


